Derivas

   

        Nunca pensé que me vería defendiendo a Jorge Verstringe, ex de CEDADE, pero entre la Cifuentes rabiosa y el cascabeleo mediatico de la 13, han conseguido hacer un héroe de la izquierda a un adalid de la derecha racista. Va a ser que, escuchar a una delegada del PP lo de la deriva antidemocrática - llamando violencia a la dación en pago, y maleducado a quien opina de forma contraria- reconvierte cualquier cosa en democráticamente plausible.

         Servidora, como su madre, su abuela y varias generaciones anteriores, piensa que "Puta la madre, puta la hija, puta la manta que las cobija". Y un gato que se nota acosado, que busca culpables a la foto Feijoo, entre Bárcenas, Ruiz Gallardón,y "otros amigos de la izquierda", podría estar, perfectamente, recostado en un almohadón del meuble. Resulta delicioso seguir a la derecha en sus médios. La trazabilidad legal del escrache mantiene una hoja de ruta cerríl, y en este momento (a 1:21 de la madrugada del día 3) roza la satanización actíva por mucho que el SUP proteste.(Les quieren obligar a identificar ciudadanos para proposición ulterior de sanciones) Y Manolito, claro, vive aterrado por si tras sus opiniones palpables, le piden un amparo de alzamiento de pata.

         Pero, se pongan como se pongan, yo, y espero que millones como yo, hemos visto la foto de Maria San Gil y Rosa Díez practicando un alegre escrache entre colegas. Visten carteles, desmelene y mueca de ira irreprimible. Y se las puede ver a cualquier hora en cualquier tendedero de la red. Aqui, en el reino no virtual, las instituciones parecen el patio del colegio de mi nieta, sin cuidadoras. Se sacan la lengua, manotean, se acusan mutuamente de mentirosos y se chivan del compañero de pupitre. Por si acaso, y antes de que nos llegue una brisa primaveral procedente de Chipre,espero que Botella me reintegre la aportación que hice a sus clases de golf. Sin intereses, que una no es gata, ni banquera, ni beneficiaria de aforamiento.